Llegó marzo y con ello también el nuevo año escolar, la
rutina de levantarse temprano, pero por sobre todo, comienzan las
horas de estudio y la realización de las tareas que los colegios les envían a
los niños para la casa.
Como padres se acerca el desafío de lograr que nuestros
hijos obtengan los mejores resultados posibles, sin que pierdan la alegría de
ser niños. Para lograr que esto sea posible es necesario que los niños se
motiven a estudiar y aprendan a ir tras sus objetivos.
En base a ello te presentamos ocho puntos básicos a
considerar para lograr este propósito:
1. Comenta con tus hijos sobre distintas experiencias de personas que conozcas (deportistas, artistas, ingenieros, periodistas, etc.) que hayan tenido éxito. Esta es una manera de que los niños comprendan que sus esfuerzos tendrán su recompensa.
2. Fíjale
objetivos tanto de corto plazo, como de largo plazo. Cuando se fijen objetivos
de largo plazo, como por ejemplo aprobar matemática con nota X, escríbanlo y
pónganlo en un lugar visible. Esto hará que el niño visualice y se enfoque en el
logro de esta meta.
3. Se debe
reconocer y premiar el esfuerzo y los éxitos obtenidos. Frases tan simples como
“lo hiciste muy bien, estoy orgullosa/orgulloso de ti”, pueden ser palabras muy
importantes para tu hijo.
4. Si tu hijo te
entrega alguna nota que no es la esperada, aliéntalo a que siga adelante y dile
que confías en sus capacidades. Jamás cometas el error de comparar su desempeño
con el de algún hermano o pariente que tenga mejores resultados que él, con frases
como “tu hermano es más inteligente”. Recuerda que todos los niños tienen
distintas capacidades y sus procesos de maduración también son distintos.
5. Si le ofreces
un premio por algún logro, que este sea de su interés. Es mejor varios premios
pequeños por logros de corto plazo. Para que estos premios no se hagan una
costumbre, ofrécelos en los casos que quieras que tu hijo cumpla con alguna
tarea que realmente le cueste, una vez que se acostumbre a hacerla, ponerle
nuevos objetivos.
6. Nunca (¡pero
nunca!) hagas comentarios en público sobre el bajo rendimiento de tu hijo. Lo
único que lograrás con esto es que el niño se sienta humillado y enojado con
los estudios o el colegio.
7. No es bueno
que los niños escuchen que los padres critican la forma de enseñar de los
profesores o que lo que estudiaron cuando niños no les sirvió para nada.
8. Es bueno que
los hijos vean a los padres comprometidos con el colegio, es decir, que asistan
a las reuniones, que participen de las actividades del colegio, que colabore
con los profesores en lo que se pueda, etc. Esto hace que tu hijo sienta que te
preocupas por él y que lo que se relaciona con el colegio es importante para
ti, recuerda que el ejemplo es muy importante para el desarrollo de los niños.
Si tu hijo tiene problemas con los deberes escolares, o no dispones del tiempo necesario para poder ayudarlo, visítanos. En el Club De Tareas
Sapiens apoyamos a tu hijo a superar sus dificultades logrando que obtenga buenas
calificaciones en el colegio.
Club de Tareas Sapiens – Cajamarca
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